Estaba yo pensando... ahora escribiría sobre: los premios sectarios de Can Alcover.
Hace unos días, el Ajuntament de Palma, dentro de los actos de las fiestas de Sant Sebastià, entregaba los premios literarios Ciutat de Palma. Desde hace algunos años, este reconocimiento que en principio se hacía sólo a los escritores en lengua catalana, se hace también a los que escriben en castellano. Esto ha provocado la incontrolable ira del sector pancatalanista de las islas, que ha puesto el grito en el cielo por lo que consideran (dicen) un ataque a la historia de estos premios "democráticos" (¿?). Así se refirió Miquel Bezares (presentador de los Premis Literaris Sant Sebastià celebrados en Can Alcover).
No sé que concepto tienen de "democrático"; pero lo que sí sé es que están enfadados y que -cual niño ofendido que se lleva la pelota para que no jueguen los demás- se han "llevado" sus "democráticos" premios a otra parte. Es más: han hecho un manifest pel prestigi dels Premis Ciutat de Palma. Lo cual deja claro cual es su concepto del término "democrático": escribir en lengua castellana en Mallorca, no es prestigioso (aunque se haya escrito una obra tipo Quijote) y no consideran a ningún autor (aunque sea mallorquín) que no escriba en su catalán estándar. Todo un ejemplo "democrático" por su parte.
El punto 2 de ese manifiesto, dice:
2. Que ens sembla inadmissible, ara, la convocatòria d’uns guardons bilingües, en una decisió presa de manera unilateral i sense ni tan sols consultar i escoltar els autors, perquè representa una involució de caràcter cultural injustificable i arbitrària que només pot comportar desprestigi i desafecció.
Hombre, el Ajuntament podría haber convocado un referéndum consultivo para saber la opinión de los escritores en lengua catalana -supervisado todo por la OCB, por supuesto-, con la pregunta: ¿acepta usted que le demos un premio a un escritor mallorquín, autor de una obra de renombre, aunque la haya escrito en castellano?
Queda claro que para los tan "democráticos" escritores que apoyan este manifiesto, el hecho de dar un premio en Mallorca a alguien que escribe en castellano, es una falta de prestigio. ¡Pues anda que no hay gente sin prestigio en el mundo! (Muchos millones más que en lengua catalana, por cierto).
Vamos con el punto 3 del manifiesto:
3. Que és la nostra obligació denunciar el menyspreu i la indiferència cap a la llengua pròpia que demostra l’equip de govern de la ciutat de Palma amb mesures com aquesta. Cal aturar el procés d’afebliment de la llengua catalana a les nostres illes, així com reconèixer el paper dels escriptors en la construcció d’una identitat cultural.
Para empezar ojo a lo "democrático" de cal aturar... així com reconèixer... Es decir, ellos marcan lo que hay que hacer y reconocer (siempre y cuando sea de su mismo pensamiento). No hablemos ya del uso cansino de binomios tipo identitat cultural que todos sabemos que sirven como pilar básico del movimiento independentista que profesan. ¿Tú hablas mi lengua? Tú eres de los míos. ¿Tú no hablas mi lengua? Fuera de estas islas. Esto es lo que deben opinar los "democráticos" escritores de lengua catalana que apoyan el citado documento.
cartel de los premios "democráticos" |
Cuando hablan de "menosprecio" hacia la "lengua propia" (entiendo que para ellos es la catalana estándar), no llego a comprender qué quieren decir. Supongo que entra dentro del juego victimista al que nos tienen acostumbrados. Porque, vamos a ver: ¿menosprecia el Ajuntament a los escritores en lengua catalana, por conceder un mismo premio en una misma categoría a escritores en lengua castellana? ¿Acaso ha dejado el Ajuntament de premiar a escritores en lengua catalana en los galardones? ¿Quien se ha opuesto ("democráticamente" eso sí) a que se le conceda un premio dentro de una misma categoría y valor a un escritor en lengua castellana? Entonces... ¿quien menosprecia a quien?
Les convendría a los "democráticos" firmantes, repasar un poco nuestras leyes. El Art. 2.4 de la tan (por ellos) usada Llei de Normalització Lingüística de Balears (1986), dice que ningú podrà esser discriminat per raó de la llengua oficial que empri. Eso significa que quien no respeta a alguien que en las islas habla catalán, está discriminando a esa persona; pero quien no respeta a quien habla castellano, también. Pero es más "democrático" y no tan menospreciable, coger y marcharse de unos premios que tratan de premiar a los escritores en ambas lenguas. Podría también citarles -no lo haré para no extenderme- todas las leyes relacionadas con el bilingüismo que en estas islas, establecen que la Administración (en este caso el Ajuntament) tiene la obligación -además de fomentar el uso del catalán que es lo único que esta gente ha leído en las normas- de proteger el uso de ambas lenguas (por nombrar algunos: art. 6.2, 7.1, 8.3, de la citada ley; o art. 4 del Estatut de Balears).
Y para terminar el artículo de hoy, intentando enlazar el asunto del bilingüismo literario, quiero que viajemos en el tiempo. Nos iremos hasta la Mallorca de principios del s. XX y allí encontraremos cómo, los propios mallorquines publicaban -sin problema- revistas en castellano y en un catalán que en nada se parece a esa cosa estándar que vemos hoy día.
La revista Mallorca Dominical (que podemos encontrar en el Archivo de Prensa Histórica del Ministerio de Cultura), publicada entre 1897 y 1901, era un claro ejemplo del respeto que los mallorquines de aquella época tenían a ambas lenguas. Su cabecera, muy bien lograda, dibujaba sobre nuestra isla un estandarte con cuatro palabras: patria, fe, trabajo y virtud. Y en ese mismo encabezamiento podía leerse con letras bien grandes: revista bilingüe. En su primer número, se autodefinía esta publicación como:
Soy una hojita que acabo de nacer [...] soy hija de padres mallorquines y castellanos, es decir, españoles [....].
Y nadie se sentía desprestigiado, ni menospreciado, ni le parecía poco "democrático", compartir espacio con gente que escribía en castellano. Claro que, supongo que en esos años el pancatalanismo no había inundado estas tierras como lo hace ahora; por culpa precisamente de mallorquines que alardean luego de ser, muy "democráticos".
cabecera del Mallorca Dominical |
¡Hasta el próximo artículo!
Gracias por compartirlo!
ResponderEliminar